En realidad el día empezó normal hasta que SHAN!!! me llama mi abuela diciendo si la acompaño junto a mis primas a salir, obvio, dije que si, no me iba a quedar en la casa barriendo.
Primero fuimos al cementerio a ver a mi abuelo, pise una posa, llenándome la zapatilla de agua. Luego al ir al mal se paso mucho mejor, en una tienda nosotros tres nos compramos estos famosos monitos “Crechiendo” que los pones en agua y nose como pero crecen. Además de que comiéramos gratis gracias a los vales que estaban dando como campaña para una diputada(gracias Lily), cual de los cuatro mas perdidos de como funcionaban si valían por papas o por plata, al final comimos muchas papas y nos fuimos a la casa.
Ahí metimos las bolitas al agua y todos mirando como crecían… a mis 16 años y todavía con estas cosas, bueno, mi niño interno todavía existe y conociéndome tiene para rato.
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